Activadores de conciencia

El tema del despertar de la conciencia individual ha alcanzado un sitial destacado dentro de los temas de auto-ayuda y crecimiento personal en las últimas dos décadas. No obstante, parte de sus orígenes new age, su poca vinculación a la evidencia científica y los disparos de muchos racionalistas y escépticos no lo ubicaban como un tema serio ni masivo.

Eso ha cambiado en los últimos 5 años, de la mano de tres fenómenos: al aumento significativo de personas que están en la búsqueda de una existencia con sentido, la equivalente explosión de metodologías de desarrollo personal (serias y no tan serias) y la confirmación de evidencia científica respecto de la centralidad de la meditación y el aumento de la positividad personal como base de la felicidad sentida y los resultados observables.

Hoy sabemos que la felicidad es un input, algo que nace de nuestro interior y que no es el resultado de un proceso de trabajo largo y sacrificado. La felicidad emerge desde adentro hacia fuera y nos hace florecer cuando la positividad personal es tres veces mayor que la negatividad. En comparación con quienes se declaran infelices, las personas felices son más sanas, longevas, inteligentes, toleran mejor el dolor, construyen mejores vínculos sociales, ganan más dinero y crean ambientes familiares, organizacionales y sociales que promueven los resultados, la innovación y la felicidad de otros. Ser feliz es un gran negocio.

La pregunta es cómo hacemos para que ese potencial de felicidad que esté dentro de nosotros salga hacia fuera, bulla, explote y florezca. Se instala el tema de las técnicas que permiten expandir la conciencia y generar aumentos sustanciales de la energía personal. Lo que usualmente me preguntan en mis conferencias y clases es ¿qué hacer?, ¿cómo?, ¿quién es serio?

Dentro de las técnicas que he conocido, estudiado y practicado, una de las que es más efectiva y generadora de conciencia y energía de orden superior es la meditación llamada “Activación de la Glándula Pineal”, un método creado por Fresia Castro, quien ha expandido sus enseñanzas por Latinoamérica y que hoy radica en México (www.cyclopea.cl). Eso responde qué hacer. El cómo se aprende en los talleres que enseñan la técnica, 12 horas de entrenamiento que transforman la mirada y cumple el objetivo de acceder a un método simple, auto-administrado en cualquier lugar y con efectos que no detallaré, pues la mejor evidencia es la experiencia personal. Basta decir que quienes lo practican dicen que su vida se transformó, que se conectaron con su sentido vital y que su efectividad ha alcanzado niveles nunca antes vistos.

Queda responder ¿con quién? Quiero detenerme en este punto pues pocas veces se mira el proceso interior que viven las personas que deciden ser instructores de metodologías de evolución e innovación personal. Se requiere mucho coraje y determinación para identificarse con un método específico, darle espacio para ser parte del quehacer y el trabajo diario, y abandonar parte de los cargos y roles anteriores. Eso los convierte en innovadores, a partir de ser líderes de sí mismos y protagonistas de su propio guión vital. Muchas personas se burlan de esos instructores, los consideran light, poco serios o, al contrario, unos iluminados narcisos. Enfrentan costos sociales, lo que amplifica el valor de su decisión por contribuir en el despertar de conciencia de quienes están buscando. De los ciegos de sí mismos sabemos que ya les llegará su tiempo y que eso depende de su libre albedrío. 

A estos paladínes del crecimiento humano los llamo Activadores de Conciencia, verdaderas fuentes de irradiación que con su determinación generan focos energéticos a disposición de quien quiera conectar con la perfección que late en el GPS interior de cada uno.

Dentro de estos corajudos está Pepe Villarreal, amigo mexicano, que cumple tres años desde su certificación como instructor de la activación de la glándula pineal. Me impresiona que para él sea un hito este aniversario, pues muestra la prioridad existencial que le da a su rol de activador de conciencias. ¡Salud Pepe! Felicitaciones para él y para las personas que valerosamente han optado por seguir la certeza en lo invisible y ponerse a disposición de la expansión de conciencia, desde lo individual a lo Superior. Por irradiación, desde arriba hacia abajo, desde adentro hacia fuera.