Entradas

Mostrando las entradas de septiembre, 2008

¿De qué felicidad hablamos?

Imagen
Estos últimos días han estado cargados a la tormenta interna y a la necesidad de encontrar respuestas más allá de las que se me han develado. Como patrón espontáneo me ha nacido buscar afuera, conversando y leyendo, necesitando contención. Me he sentido al límite de mi comprensión y de mis afectos. En este trance pedí el consejo a una gran amiga, sabia, reflexiva y a quien admiro pues habla poco y encarna en los actos su peregrinar. De las muchas cosas que me dijo y que me tienen mirando mis creencias, la primera que me sorprendió fue su idea de la felicidad, radicalmente distinta a la que tenemos la mayoría. Generalmente concebimos la felicidad como un resultado de nuestros actos o de las relaciones que establecemos con otros, es decir, como un output en el proceso de la vida. Quienes meditan por años sostienen que la felicidad es un estado anterior al actuar en el mundo, que se logra en conexión con la fuente de lo Superior. Es en contacto con esa Luz que se logra la felicidad, la q

El sentido de propiedad: es mío

Imagen
Ando con severos problemas con el sentido de la propiedad, con la idea de poseer algo o a alguien. Es un sentir brumoso donde sólo atisbo un par de cosas. 1. En los vínculos, sentir que otro me pertenece o que le pertenezco a otro, en cualquier proporción, por pequeñita que sea, saca a esa relación del origen libre e inspirador que la formó. Instala la primacía de las expectativas y la obligatoriedad de su cumplimiento por sobre la voluntariedad y la pasión de ser con otro. Cuando cualquier tipo de relación entra en la exigencia hacia otro, es el principio del término de "eso" que los unió. Obviamente me refiero a relaciones voluntarias y libres, pues donde está metido el miedo, la subsistencia y el poder es otro contexto relacional. Lo siento en primera persona: relaciones con personas que me exigen sin que yo les conceda ese espacio y que sienten que pueden tomar de mi un espacio que no les abrí, traspasan ese límite de lo individual donde yo me siento abusado, exigido, vio