Volver al hogar como metáfora de la Vida
Igual que el post anterior, extractaré algunas ideas de Claudio Araya sobre el tema de volver al hogar como metáfora de la vida, en su libro "El mayor avance es DETENERSE".
Cuando hablo de volver al hogar me refiero a la capacidad personal o grupal de volver a estar presentes y concientes.
Ser conciente del modo en que estoy presente y ser conciente de la presencia del otro son dos dimensiones de retornar al hogar.
Volver al hogar es volver a conectarnos con lo más cercano.....sintiéndose en bienestar y con cobijo.
Volver al hogar es sinónimo de tomar refugio en nosotros mismos, es tomar contacto con nuestras emociones, percepciones y pensamentos, juntos con reconocerlos y hacer la práctia de aceptarlos, es percibir nuestra capacidad natural de estar y sentirnos vivos. Volver a nuestro hogar es sinónimo de darnos cuenta que la vida transcurre aquí.
Volver al hogar es pasar de un estado de preocupaciones a un estado de bienestar, de morar más tiempo en lo que Varela denomina Presencia plena / Conciencia abierta.
Volver al hogar con los demás supone que sólo desde la propia conciencia podemos establecer un vínculo genuino con el otro. Es sinónimo de encuentro.
Para que nuestro hogar sea hogar tiene que estar habitado, con otros.
Volver al hogar tiene el sentido de pasar de la complejidad a la simplicidad, de volver a habitar en un espacio natural de bienestar.
Al morar en el propio hogar habitamos con propiedad en el momento presente, presente que es, al mismo tiempo, instante y regalo.
Cuando hablo de volver al hogar me refiero a la capacidad personal o grupal de volver a estar presentes y concientes.
Ser conciente del modo en que estoy presente y ser conciente de la presencia del otro son dos dimensiones de retornar al hogar.
Volver al hogar es volver a conectarnos con lo más cercano.....sintiéndose en bienestar y con cobijo.
Volver al hogar es sinónimo de tomar refugio en nosotros mismos, es tomar contacto con nuestras emociones, percepciones y pensamentos, juntos con reconocerlos y hacer la práctia de aceptarlos, es percibir nuestra capacidad natural de estar y sentirnos vivos. Volver a nuestro hogar es sinónimo de darnos cuenta que la vida transcurre aquí.
Volver al hogar es pasar de un estado de preocupaciones a un estado de bienestar, de morar más tiempo en lo que Varela denomina Presencia plena / Conciencia abierta.
Volver al hogar con los demás supone que sólo desde la propia conciencia podemos establecer un vínculo genuino con el otro. Es sinónimo de encuentro.
Para que nuestro hogar sea hogar tiene que estar habitado, con otros.
Volver al hogar tiene el sentido de pasar de la complejidad a la simplicidad, de volver a habitar en un espacio natural de bienestar.
Al morar en el propio hogar habitamos con propiedad en el momento presente, presente que es, al mismo tiempo, instante y regalo.
Comentarios
Y tan solo agregaría que para mí, volver al hogar es volver a tomar conciencia del Ser Espiritual y Original que cada uno de nosotros es.
Volver al hogar es volver a ese estado de inocencia y felicidad incondicional e ilimitada, libre de preocupaciones, juicios, esquemas, y paradigmas. Y finalmente, para mí, volver al hogar es tomar conciencia que en esencia soy igual a Dios: Un ser de energía, infinitamente feliz.
Muchas gracias por los comentarios, me sumo a ellos. Efectivamente la Thich Nhat Hanh han desarrollado la metáfora de volver al hogar, es una metáfora y además es un práctica concreta, un rito de volver a tomar refugio en si mismo. Me parece una practica poderosa.
Agradezco a Juan Marco por compartirnos otra fuente desde el cristianismo.
Saludos, Claudio.