Mi lenguaje propio

A continuación copiaré extractos del bello libro "El mayor avance es DETENERSE" de Claudio Araya. Es un libro de muchas facetas y aprendizaje (parte 1: escucha atenta, la voz del silencio, la voz de las palabras, fenomenología del bienestar, aprender a des-aprender. Parte 2: Aplicaciones y prácticas).

Sólo tomaré un par de páginas sobre cómo identificar y encontrar el lenguaje propio. Reitero que son ideas de él, que yo transcribo por la profundidad, lucidez y belleza que tienen. ¡Muchas gracias Claudio!

• La propiedad (de mi lenguaje) tiene que ver con obedecer la propia voz que clama.

• Un lenguaje propio es un lenguaje que articula sentido en la interpretación y en la acción, modificando la visión de sí mismo y de aquello que nos rodea.

• Un lenguajear propio nunca es definitivo, tajante y resolutivo, sino más bien una continua indagación, incluso sobre lo que nos decimos a nosotros mismos que sabemos. En este sentido, el lenguaje propio es el que nos abre a la impermanencia y el misterio.

• El lenguaje propio es dinámico, ayuda a serpentear con sus distinciones en la complejidad, es un lenguaje transitivo que no se toma a sí mismo muy en serio, no cree enunciar verdades indubitables, sino más bien amasa palabras que generan aperturidad.

• El lenguaje propio puede describir situaciones, pero en la médula de su propiedad está su carácter pragmático y generativo.

• El lenguaje propio no clausura puertas, al contrario, edifica puentes. El lenguaje generativo tiene la capacidad de significar, le da un sentido espontáneo y novedoso a lo que está ocurriendo, una renovación ante lo percibido en el momento presente.

• Nos permite habitar en un lenguaje que pregunte más que responda.

• El lenguaje propio es un lenguaje humilde, ya que no tiene la pretensión de fundar en sí mismo una realidad indubitable, sino más bien, es un lenguaje curioso, que pregunta, que indaga apreciativamente, valorando la experiencia del momento presente, buscando conectar la palabra con la sensación sentida.

• Un lenguaje propio brota de una experiencia viva, abierta y desprejuiciada, libre de ideologías o sistemas totalitarios. El lenguaje propio es, al mismo tiempo, un reflejo y una construcción de la experiencia vivida en el momento presente.

Quienes quieran comprar este bello y muy recomendable libro, escriban a su autor Claudio Araya al mail carayav@gmail.com.