El talento de Argentina y Brasil eliminado del mundial

En cuartos de final del mundial de Sudáfrica se fueron eliminados Brasil y Argentina, equipos donde están los mayores talentos individuales para el fútbol. Brasil jugó muy bien ante Holanda, haciendo gala de su conectividad, equilibrio y positividad. Todo iba bien hasta el error de Felipe Melo y Julio César. Ese error derrumbó emocionalmente a Brasil, que fue presa de su ansiedad y su negatividad. Este equipo, usualmente de alto desempeño, falló en la esencia: sostener los afectos en calma en los límites inciertos y los desafíos exigentes.

Lo de Argentina es diferente y bastante más claro para la mayoría. Era un grupo de buenos jugadores que no tuvo dinámica ni mecánica de equipo, con la atención puesta en Maradona y no en los protagonistas (los jugadores), y apostando a que la experiencia del DT y su "capacidad motivadora" iban a hacer surgir buenos resultados. Eso es entender poco del funcionamiento de alto desempeño en los equipos y, desde esta óptica, el funcionamiento del equipo argentino era crónica de una eliminación anunciada, más allá de los afectos por los amigos de ese país.

El liderazgo efectivo (el de nivel 5 de Jim Collins) tiene dos ejes centrales (humildad y férrea determinación en los procesos de trabajo), ambas características ausentes en un arrogante Maradona. Se apostó a la emotividad latina, la motivación extrínseca de Maradona sobre los jugadores y al talento individual. Por eso fueron eliminados. Los buenos resultados emergen de las dinámicas colectivas de relación, donde el talento individual es una condición necesaria y claramente insuficiente. Gana el nosotros, no el yo.

Hoy vimos un Equipo de Alto Desempeño, Alemania: conectividad, timing, equilibrio yo-otros, afectos estables y sentido compartido. Holanda y España van en la misma. Desde la óptica del liderazgo, los equipos de alto desempeño se caracterizan porque el líder ocupa una posición secundaria y poco visible, responsable de crear la ingeniería de las relaciones (táctica en lenguaje futbolístico), la forma de coordinar las acciones (dinámica futbolera), generar un sentido compartido que explote la motivación individual y colectiva, y proveer condiciones emocionales estables y marcadas por lo apreciativo y positivo.

La eliminación de Argentina y Brasil, y la clasificación de Alemania, Holanda y España confirman que el talento sin rigor ni disciplina no alcanza resultados sostenibles. La arenga motivadora no sustituye al trabajo. Si bien esto no es matemática perfecta, es lo que mejor predice resultados de alto desempeño y aumenta la probabilidad de alcanzar lo que se busca. Por algo Alemania ha llegado a 12 semifinales de mundiales en 16 ocasiones. 

Comentarios

Sergio dijo…
El fin de semana pense que seria bueno escribir en mi Blog acerca de las diferencias notables (mas alla del marcador) entre Alemania y Argentina, creo que no podrian expresarse mejor que en este articulo, felicitaciones.
Anónimo dijo…
Ignacio me gustaron 4 frases. Ojalá todos pudieramos aplicarlos, ser consecuentes con estos a diario, en toda acción y en todo momento:

1.- Proveer condiciones emocionales estables y marcadas por lo apreciativo y positivo.

2.- Sostener los afectos en calma en los límites inciertos.

3.- El talento sin rigor ni disciplina no alcanza resultados sostenibles.

4.- Los buenos resultados emergen de las dinámicas colectivas de relación, donde el talento individual es una condición necesaria y claramente insuficiente. Gana el nosotros, no el yo.

Entradas más populares de este blog

Especialismo

Luces y sombras de la encuesta Great Place to Work

Constelaciones de energía